En las últimas décadas el mundo ha presenciado un desmesurado desarrollo de los medios de comunicación y las tecnologías gracias a la importancia que han tomado los procesos investigativos y la aplicación de sus resultados a la generación de elementos que faciliten todo tipo de quehacer de los individuos; se han congregado especialistas en múltiples campos de acción para desarrollar productos que faciliten la interacción entre las personas y las máquinas que invaden los mercados y la cotidianidad y que permitan analizar y entender los tipos de reacciones y relaciones que se pueden dar entre individuos y tecnologías para agilizar procesos comunicativos y generar conocimientos a partir de dichas interacciones.
El desarrollo se ha visto reflejado un todos los campos y el diseño no ha sido la excepción, las tecnologías aplicadas a objetos cada día toman más fuerza y se han implementado un sinnúmero de tecnologías y nuevos medios en la creación de elementos generadores de procesos comunicativos multidireccionales que abren nuevas posibilidades de interacción con la información, el conocimiento y los individuos. Pero el desarrollo de proyectos de diseño ha trascendido los objetos para enfocarse ahora en los ambientes construidos, es decir, el entorno; se han desarrollado instalaciones interactivas, espacios inteligentes, interfaces físicas y entornos virtuales con el fin de ampliar las posibilidades de interacción de los individuos con los elementos que los rodean y de generar procesos de comunicación en los cuales el sujeto receptor se convierte también en emisor para transmitir información de manera multidireccional y crear espacios de intercambio de experiencias con posibilidades de convertir dicha información en conocimientos. Sin embargo, y a pesar de los nuevos campos que se han abierto para el diseño y la creación gracias a las nuevas tecnologías, los sistemas tecnológicos han logrado alcances que pueden llegar a convertirse en invasivos en el sentido de que tienen la capacidad de explorar a fondo las características perceptivas de los individuos y algunas veces pueden verse vulnerados sus principios ya que no se sienten cómodos con interacciones que los acercan demasiado a objetos o situaciones nunca antes experimentadas.
Es entonces en este punto donde el diseño entra a jugar parte importante en el desarrollo de proyectos que involucren tecnologías y exploración de nuevos medios de comunicación a través de objetos y espacios dotados de capacidades de reaccionar ante acciones de individuos. Está en manos del diseñador la labor de generar no sólo espacios, sino también objetos e interfaces capaces de generar procesos comunicativos que no atenten contra la intimidad de sus usuarios, pero que al mismo tiempo representen retos innovadores que permitan generar diálogos a diferentes niveles y abran posibilidades para la adquisición de saberes y conocimientos.
Es válido afirmar entonces que el diseño visual, como disciplina teórico proyectual está en la capacidad de instruir al diseñador en campos comunicativos donde las prioridades de generación de proyectos sean las características y necesidades de los usuarios a los cuales están dirigidos para, de esta forma, generar productos que además de que exploren la interacción y las posibilidades comunicativas de los individuos, también generen conciencia social a cerca de la importancia del buen uso de las tecnologías aplicadas a los medios de comunicación y abran nuevos horizontes para la exploración y la investigación.
Los entornos virtuales han demostrado ser hasta el momento una excelente alternativa para incentivar la interacción de los individuos y para generar espacios poco convencionales de experimentación sensorial, sin embargo al momento de planear un proyecto de este tipo, se deben tener muy claros los objetivos para los cuales es creado, aún cuando no se tenga plena conciencia de los resultados que se obtendrán a partir de la interacción de los individuos y así asegurar que a pesar de todas as posibles entradas con las que pueda contar el sistema, las salidas o respuestas no representarán ningún riesgo para quien interactúe con él.
Es aún más importante mirar el lado positivo de la situación y ver como se han centrado los esfuerzos científicos y tecnológicos para generar espacios que a partir de la aplicación de tecnologías, incentivan los procesos comunicativos mediante estímulos sensoriales que le permiten a los individuos desarrollar capacidades interactivas que les enseñan a relacionarse mejor con los objetos y el medio con el fin de preservarlo y de romper las barreras tecnológicas y de lenguaje que en muchas ocasiones generan miedo y restringen las posibilidades de convertir la información que fluye a través del sistema en conocimientos.
13/7/08
UNA MIRADA ETICO SOCIAL DESDE LAS NUEVAS TECNOLOGÍA Y SUS APLICACIONES AL DISEÑO
en 14:05 Publicado por Luis Miguel Etiquetas: ENTORNOS VIRTUALES
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